¿Qué tipo de puertas plegables elijo para mi hogar?

Las puertas plegables son un elemento perfecto si quieres ahorrar espacio en tu hogar, ya que al ser plegables ahorras ese espacio que ocupa una puerta abierta tradicional, además proporcionan un excelente toque estético, permiten una fácil maniobrabilidad y pueden hacer que hogar sea más estético y acogedor. Pero… ¿Qué puerta plegable elijo? ¿Qué tipo de material es el adecuado? En ésta publicación intentaremos aclarar esas dudas que puedan surgirte.

Puertas plegables de madera

Las puertas plegables de madera son las que tienen mejor calidad y acabado y normalmente se usan para separar estancias o incluso como puertas de armario. Además de aportar a la estancia la estética y calidez de la madera también se pueden lacar con distintos colores y añadirle complementos como por ejemplo cristal, dibujos, cerraduras, etc. Las puertas plegables de madera siempre se recomiendan instalarlas en interiores ya que al ser de maderas no es conveniente que se expongan a factores meteorológicos como la lluvia y evitar así que se deteriore rápidamente. También requieren de un mantenimiento más frecuente que en otro tipo de materiales.

Puertas plegables de PVC

Las puertas plegables de este tipo son las que normalmente tienen un precio más económico al ser el PVC un material sintético, pero por contrapartida a las de madera es un material más endeble.  Aunque no son tan bonitas estéticamente como las de madera las puertas plegables de PVC se pueden lacar, imitando así a las de madera, o incluso puedes añadirle cristales de metacrilato para el pase de la luz y aumentar así el efecto decorativo.

Puertas plegables de aluminio

Este tipo de puertas plegables son perfectas para ser colocadas en exteriores ya que son resistentes y muy ligeras. Se suelen utilizar para combinar una estancia determinada como la cocina o el comedor con el jardín actuando así como una ventana, lo cual también proporciona una luminosidad excelente. Además existen puertas plegables de aluminio con mayor resistencia que tienen una función antirrobo y de mayor seguridad, aunque éstas suelen tener un precio más elevado que las convencionales.